EL ESPÍRITU DEL ANTICRISTO

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Dentro de la enseñanza milenaria está la creencia de que alguien surgirá y se convertirá en “El Anticristo” que exigirá ser adorado. Algunos en el pasado han imaginado que esto es Stalin, Hitler, Mussolini–todos ahora muertos y desaparecidos. Cada generación que pasa continúa en la misma búsqueda de este personaje fantasma.

Entonces, ¿quién es el anticristo? Adam Clarke lo dijo muy bien: “Cualquier persona, cosa, doctrina, sistema de religión, política, etc., que se oponga a Cristo, al espíritu y difusión de Su evangelio, es anticristo. No necesitamos buscar a este ser imaginario en ninguno de los anteriores exclusivamente. Incluso el protestantismo puede tener su anticristo al igual que el papismo.

Todo hombre que se opone al espíritu del evangelio, y todo maestro y escritor que se esfuerza por rebajar la norma evangélica al espíritu y gusto del mundo, es un verdadero anticristo, no importa dónde o entre quién se encuentre. Las herejías que surgieron en los días de San Juan eran el anticristo de aquel tiempo. Así como ha habido una sucesión de oposiciones al cristianismo en su espíritu y propagación a través de cada era desde su promulgación en el mundo, también ha habido una sucesión de anticristos.

Podemos llevar este asunto mucho más abajo–todo enemigo de Cristo, todo aquel que se opone a Su reinado en el mundo, en otros o en sí mismo, es un anticristo, y por consiguiente todo hombre malvado es un anticristo. Pero el nombre se ha aplicado generalmente a cualquier persona o cosa que se opone sistemáticamente a Cristo y a Su religión”.

Cualquiera que sea tu opinión del anticristo, el apóstol Juan declaró que ya estaba en el mundo en sus días. “Y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios; y éste es el espíritu del anticristo, del cual vosotros habéis oído que ha de venir, y que ahora ya está en el mundo”. 1 Jn 4:3. “Vosotros habéis oído que ha de venir”. No es un hombre, ni una mujer, sino un espíritu que obra a través de la gente.

También dijo que había muchos anticristos en sus días. “Hijitos, ya es el último tiempo; y como vosotros habéis oído que el anticristo ha de venir, así también al presente hay muchos anticristos; por lo cual sabemos que es el último tiempo”. 1Jn 2:18.

Menciona que en su tiempo era “el último tiempo”, lo que significa que el Día del Evangelio es la última dispensación de misericordia en la que la gente puede encontrar la salvación. No hay era ni oportunidad, ni reinado terrenal de mil años que siga. El Apóstol Pablo, hablando de manera similar, dice que “los fines de los siglos han venido” 1 Co 10:11.

“¿Quién es mentiroso, sino el que niega que Jesús es el Cristo? Éste es anticristo, que niega al Padre y al Hijo”. 1 Jn 2:22.

“Porque muchos engañadores han entrado en el mundo, los cuales no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. El que tal hace es engañador y anticristo”. 2 Jn 1:7.

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